Los pulgones, a menudo llamados «piojos de las plantas», pueden ser la pesadilla de cualquier jardinero. Casi invisibles a simple vista y sorprendentemente hábiles para esconderse en el envés de las hojas, estas plagas pueden causar estragos en tus plantas alimentándose de la savia.
Por desgracia, su talento para causar problemas no acaba ahí. Además de causar daños físicos a las plantas al alimentarse, los pulgones son famosos por propagar enfermedades entre la flora.
Al perforar el tejido vegetal con su aparato bucal en forma de aguja, estos bichitos bombean inadvertidamente a las plantas afectadas virus capaces de causar pandemias vegetales generalizadas.
Pero no desesperes: librar tu jardín de los pulgones es posible.
A continuación, hemos recopilado una lista de métodos eficaces para decir adiós a los pulgones y devolver a tus plantas todo su esplendor.
Entiende a tu enemigo
Entender a los pulgones es clave para su erradicación. Conocidos por su rápida reproducción y adaptabilidad, estos insectos chupadores de savia tienen varias formas y colores.
Los tipos más comunes son el pulgón verde del melocotonero, el pulgón de la col y el pulgón de la adelfa, que pueden encontrarse en una gran variedad de especies vegetales.
He aquí algunos de los tipos de pulgón más frecuentes en Norteamérica:
Tipo de pulgón | Descripción |
Pulgón verde del melocotonero (Myzus persicae) | El tipo más común de pulgón que acecha en los jardines es el pulgón verde amarillento del melocotonero. Sin embargo, no te dejes engañar por su nombre: aunque tenga predilección por los melocotoneros, no es exclusivo de estos árboles frutales. Desde las hortalizas hasta las flores ornamentales, esta plaga omnipresente puede atacar a muchas especies vegetales conocidas, extendiendo su insidioso alcance mucho más allá de su homónima. En cuanto a los cultivos de hortalizas, los tomates y los pimientos son especialmente susceptibles a las invasiones de estos escurridizos insectos. |
Pulgón de la patata (Macrosiphum euphorbiae) | El pulgón verde de la patata es una plaga frecuente, especialmente atraída por los miembros de la familia de las solanáceas. Estos insectos destructivos tienen un apetito insaciable por las berenjenas, los pimientos, los tomates y, por supuesto, las patatas. Desgraciadamente, tanto para los jardineros domésticos como para los agricultores comerciales, estas plagas pueden infligir daños importantes a estas preciadas plantas, alimentándose de ellas y transmitiéndoles enfermedades dañinas. |
Pulgón de la col (Brevicoryne brassicae) | El pulgón de la col presenta un rasgo visual distintivo que lo diferencia de otros insectos. A primera vista, su color parece gris. Sin embargo, si se observa más de cerca, se puede discernir que el propio insecto es en realidad verde. ¿Cuál es la causa de esta discrepancia? Una capa cerosa única, a menudo llamada «escurridiza», envuelve su cuerpo de forma protectora. Sus huéspedes preferidos son los miembros de la familia de las coles, incluidas las mostazas y las brásicas. |
Pulgón de la adelfa (Aphis nerii) | Debido a su vibrante color amarillo, el pulgón dorado de la adelfa es bastante fácil de detectar. Entre las diversas especies de pulgones, el de la adelfa dorada destaca con orgullo: un verdadero testimonio del talento artístico de la Madre Naturaleza. Las plantas de algodoncillo y los arbustos de adelfas suelen albergar a estos vívidos insectos, lo que les proporciona un entorno ideal para desarrollarse. |
Cómo identificar los pulgones
Los pulgones pueden ser minúsculos, pero sus daños son colosales. Examinemos los signos reveladores de la invasión de pulgones que puedes utilizar para detectar a estos escurridizos bichos antes de que tus plantas se rindan al fantasma.
- Inspecciona tus plantas de cerca: Coge tu lupa de confianza y prepárate para el caos microscópico. Los pulgones tienden a agruparse en el envés de las hojas o en los brotes nuevos, así que tómate tu tiempo para examinarlos.
- Amplía su aspecto: En cuanto al tamaño, los pulgones miden entre 1 y 3 mm, así que sí, hablamos de DIMENSIÓN. Su abdomen bulboso, sus antenas puntiagudas y su cuerpo en forma de pera los distinguen entre las plagas del jardín.
- Vigila su ciclo vital: Estos bichos se reproducen más rápido que los conejos, así que corta de raíz cualquier infestación antes de que exploten y se conviertan en terrores de alas diminutas. Los pulgones adultos dan a luz ninfas vivas que maduran en unos días y forman sus propias familias.
- Identifica su tarjeta de visita, la melaza: es el dulce néctar que segregan los pulgones cuando se alimentan de savia. Busca una película pegajosa que recubra las hojas y las superficies cercanas a tus plantas: una pista segura de que estos invitados se han autoinvitado a cenar.
- Cuidado con los síntomas secundarios: Una planta infestada de pulgones mostrará a menudo hojas rizadas o arrugadas, decoloración y crecimiento atrofiado. La presencia inusualmente alta de hormigas es otra gran señal de alarma, ya que acuden a estos insectos chupadores de savia para un bufé de melaza «todo lo que puedas comer».
¿Qué aspecto tienen los daños causados por los pulgones?
Los daños causados por los pulgones pueden adoptar diversas formas. A continuación te explicamos cómo determinar si estas conocidas plagas se han instalado en tu casa.
- Ver una colonia de pulgones en acción es una señal inequívoca de que se están dando un festín en tus plantas. De color verde, amarillo, negro o incluso rosa, estos pequeños monstruos se reúnen en el envés de hojas y tallos, chupándoles la vida con avidez.
- Mientras se dan un festín, los pulgones dejan tras de sí un rastro de caos. Su insaciable apetito de savia hace que las hojas amarilleen y se enrosquen, dejando a su paso un mosaico de follaje marchito. En casos graves, este implacable ataque debilita las plantas, haciéndolas susceptibles a enfermedades y deteniendo por completo su crecimiento.
- Para colmo de males, los pulgones excretan una sustancia azucarada llamada melaza, que se apelmaza en hojas y ramas. Este residuo brillante atrae a las hormigas y allana el camino al moho de hollín, un hongo negro que se extiende como la pólvora.
- Atraídas por la dulce melaza, las hormigas protegen a los pulgones de los depredadores a cambio de esta delicia azucarada. Es una asociación siniestra que augura un desastre para la salud de tu jardín.
Cómo deshacerse de los pulgones
Con vigilancia y medidas proactivas, puedes detectar a tiempo los daños causados por los pulgones y cortarlos de raíz, protegiendo así tus preciosas plantas de estos formidables enemigos.
Métodos sin productos químicos
Antes de lanzarte de cabeza a una guerra sin cuartel contra los pulgones, considera algunas estrategias ecológicas para recuperar el control de tu jardín. Estos métodos sin productos químicos benefician a tus plantas y al medio ambiente en general.
Empieza con algo sencillo: rocía tus plantas con agua.
Utiliza una manguera con boquilla pulverizadora y un chorro fuerte de agua para ahuyentar a los pulgones y evitar que vuelvan. Haz que forme parte de tu rutina; rociar regularmente tus plantas puede mantener bajo control las poblaciones de pulgones y evitar futuras infestaciones.
Otra opción ecológica es introducir insectos beneficiosos, como mariquitas y crisopas, en el ecosistema de tu jardín. Como depredadores naturales de los pulgones, estas útiles criaturas trabajan día y noche para frenar el crecimiento de los molestos invasores.
Por último, no subestimes el poder de la plantación estratégica. Ciertas variedades de plantas pueden actuar como repelentes de pulgones y como faros para sus depredadores.
Considera la posibilidad de incorporar caléndulas, hinojo y eneldo al diseño de tu jardín. Estas plantas emiten olores que disuaden a los pulgones, atrayendo a valiosos aliados como mariquitas y crisopas.
Remedios naturales
Muchas soluciones orgánicas controlan eficazmente las poblaciones de pulgones y mantienen sanas tus plantas, todo ello sin poner en peligro tu querido jardín.
Una receta bien probada es un pulverizador casero de ajo. Para crear este remedio natural contra los pulgones, sigue estos sencillos pasos:
- Mezcla 10-12 dientes de ajo con medio litro de agua.
- Cuela la mezcla, asegurándote de que no queden trozos sólidos.
- Viértela en una botella pulverizadora.
¡Voilà! Ya tienes tu propio insecticida natural para aplicar en las zonas afectadas.
Otra opción ecológica es el jabón insecticida, diseñado específicamente para combatir plagas de cuerpo blando como los pulgones. El jabón insecticida es seguro para la mayoría de las plantas y puede comprarse en la mayoría de las tiendas de jardinería o mezclarse fácilmente en casa con jabón líquido suave.
Para hacerlo tú mismo, mezcla una cucharada de jabón líquido suave para vajilla con un litro de agua. Asegúrate de tratar tanto el haz como el envés de las hojas, ya que los pulgones suelen vivir bajo la cubierta protectora de las hojas.
Técnicas de barrera
Las barreras físicas son otra solución para mantener a raya a los pulgones, garantizando que tus plantas se mantengan sanas y libres de plagas.
Las cubiertas para hileras, también conocidas como vellón de jardín o malla antiinsectos, pueden colocarse sobre tus plantas para protegerlas de las plagas. Este tejido ligero permite el paso de la luz solar y la humedad, al tiempo que mantiene alejados a los pulgones.
Asequibles y fáciles de instalar, estas barreras son perfectas para proyectos de jardinería a pequeña y gran escala.
Si las hormigas protegen a tus inoportunos invasores de hojas, disuádelas aplicando Tanglefoot o vaselina alrededor de los troncos de árboles y arbustos. Estas sustancias crean una barrera infranqueable para las hormigas, impidiéndoles acceder a la melaza que ansían.
La salud de las plantas importa
Un jardín sano es la mejor defensa contra los pulgones.
Mantén tus plantas resistentes proporcionándoles luz solar, nutrientes y agua adecuados.
Al mismo tiempo, evita sobrefertilizar tus plantas con un exceso de nitrógeno. Aunque parezca contrario a la intuición, demasiado nitrógeno puede favorecer el crecimiento de follaje blando, que es el favorito de los pulgones.
Mantener limpio tu jardín también minimiza los caldos de cultivo para las poblaciones de plagas. La poda es una herramienta valiosa para este fin: vigila para identificar y eliminar las ramas enfermas o infestadas en cuanto las descubras.
Por último, presta mucha atención a las hojas de tus plantas. Si observas signos de infestación activa en alguna hoja, retírala y destrúyela inmediatamente.
Reflexiones finales
Transformar tu jardín en un entorno poco acogedor para los pulgones puede parecer un reto. Sin embargo, poner en práctica unas cuantas técnicas puede ayudarte a construir una sólida defensa contra estos invasores y asegurar el crecimiento y la vitalidad continuos de tu jardín.
Permanece atento a los signos de infestación. Los pulgones son pequeños, pero pueden multiplicarse rápidamente e invadir tu vegetación en cuestión de días, dejando a su paso daños antiestéticos.
Recuerda inspeccionar cuidadosamente tus plantas en busca de grupos de pulgones, hojas descoloridas o rizadas, o residuos pegajosos conocidos como «melaza». Detectar a tiempo a estos alborotadores puede suponer la diferencia entre enfrentarse a un pequeño inconveniente o a una invasión total.
Con persistencia y las medidas adecuadas, puedes desterrar a esos molestos pulgones y saborear la gratificante belleza de un jardín floreciente.
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Enamorado del mundo del golf, Jack obtuvo una licenciatura en Administración de Campos de Golf en THE Ohio State University. ¡Esta trayectoria profesional le permitió trabajar en algunos de los campos de golf de más alto perfil del país! Debido a la pandemia, Jack comenzó Inside The Yard como un ajetreo secundario que rápidamente se convirtió en su ajetreo principal. Desde que comenzó la empresa, Jack se mudó a una granja en el centro de Arkansas, donde él y su esposa crían ganado y dos niñas pequeñas.